Noches de viernes
A veces me cansa pasar las noches de viernes sola en mi casa.
No, no quiero salir de rumba y perderme de la borrachera.
A veces solo quisiera tener alguien o alguienes con quien salir y tomarme una cerveza, hablar de cosas cheveres y eso... hablar, filosofar, y caminar por la noche en la ciudad...
Me hace falta la universidad...
Cada vez las cosas más simples como tener un grupo de gente con quien hablar de todo y de nada se vuelven más complicadas.
Es una lástima no tener con quienes compartir tanta felicidad y tantas cosas buenas que pasan en la vida, porque simplemente, con quienes quisiera vivir esas cosas ya tienen otras personas o simplemente, no tienen el tiempo.
Y posteo esto porque no hay ninguno esta noche, tengo la existencial y estoy sola como un hongo (bueno, lo he estado casi toda mi vida, no debería quejarme... perdí aquella sana costumbre... cuando uno descubre lo que es estar acompañado se malacostumbra)
Solo yo y las luciérnagas... esto es igual que hablarle a la pared, solo que la pared esta pintada de colores bonitos...
Comments
También creo que es interesante el cambio que uno experiencia. En un momento, los viernes eran para irse de rumba, pero a medida que uno se vuelve viejo, quiere que los viernes sean más relajados.
Solo espera y ya aparecerá alguien que te acompañe.
NOCHE DE SILUETAS!!!
ver libros de aves, hacer figuras de animales en la pared, o ver That Peep and Mitchell show en Film and Arts... (si es que lo siguen dando)