Pulsión de procrastinación

Y qué le vamos a hacer, siempre hay algo que hacer y no lo hacemos por simple pereza, porque no tenemos ganas o porque no nos gusta hacerlo. Soy una procrastinadora por excelencia, siempre dejo lo más importante de último y gasto mis minutos en nimiedades; comentar aquella foto bonita que ví en tal website o me pongo a leer el libro que no debo leer, charlar con alguien con quien puedo charlar en otro momento, quedarme viendo El Gourmet en lugar de cocinar (porque como con los ojos). Debería estar leyendo más para por fin terminar mi tésis pero en lugar de éso me puse a escribir ésto...

Porque las pulsiones de la procrastinación son más fuertes e importantes que las de la obligación. Tristemente para mí.